Un caballero sabe seguir un estilo de vida que se respalde en el honor y principios que lo conduzcan de una manera más respetable en su entorno, por ello te pasamos algunas reglas básicas para demostrar qué tipo de ‘gentleman’ eres.

Vístete a la altura

Lleva siempre lo mejor de tu armario, cada día es una excelente oportunidad para mostrarte ante el mundo, sin importar si los demás no lo hacen. Nada destaca más en una habitación que un hombre bien vestido y que sabe portar su atuendo con la elegancia que se requiere. Un traje siempre estará a la altura, junto con unos zapatos bostonianos. Si quieres agregar un toque casual, puedes llevar una bandolera en piel genuina de pitón, donde podrás llevar contigo los ‘must’ que siempre traes contigo.

Busca la proporción

El corte a la medida se hizo por una razón en especial. Busca sacos que se ajusten en el largo que necesitas y en el ancho de tus hombros, te puedes evitar muchos problemas si buscas la talla que se adapte mejor a ti o bien localizar a un sastre que pueda ayudarte a hacer los arreglos que tus prendas necesiten.

Tu rutina es privada

Ir al gimnasio es una excelente forma de mantenerte en forma, sin embargo, no es necesario que todos se enteren de cada ejercicio en tu rutina. Es falso que si no subes la ‘selfie’ en el gimnasio no genera resultados. Tus rutinas personales son mejor mantenerlas en lo privado, deja que los resultados hablen por sí solos.

Aprende a sacar lo mejor de ti mismo

Nadie sabe qué es lo que se te ve mejor puesto que tú mismo, conoce los colores que van mejor con tu tono de piel, los estilos que van mejor con tu cabello y un estilo que refleje tu personalidad. Integra un armario que incluya prendas que destaquen lo mejor de ti y proyecten al verdadero caballero que eres.

Tu forma de ser es lo que te hace un caballero

Finalmente, el punto más destacado de un caballero son sus modales. Y no te estamos pidiendo que te conviertas en un lord inglés con monóculo al ojo, simplemente que sigas las reglas básicas de convivencia con los que están a tu alrededor: decir por favor, gracias y respetar el espacio y puntos de vista de los otros no cuesta nada y te facilitará mucho las cosas.
Después de estos puntos no hay forma de que no saques al caballero que hay en ti, pongámoslos en práctica a partir de ahora.

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